domingo, 5 de agosto de 2007

Tan Icaro.

Contemplo rayos de tu iris.
En mis ojos…
Cuan puñal. Hiere.
Cera derretida toca mi cuerpo.
En mis hombros…
Cuan leño ardiente. Quema.

Más aun así no detengo mi vuelo.
No soy parte de mito alguno.

Esplendor en la esclerótica de tu espacio.
Anhelada oscuridad de tu mancha solar…
Y al fin…
En el centro…
el brillo de tu pupila.





[...y tu sol ocular retratado en mi retina digital quedo .]



3 comentarios:

Anónimo dijo...

ME GUSTA!! cada vez más poético, palabras muy llenas, ambigüas y (a la vez) precisas. como siempre, aunque no te lo creas, gracias por tu ARTE! AGOS

Anónimo dijo...

nuevo y autentico!!!!!!!

Anónimo dijo...

Icaro...shh!